La odisea de Francisco Baeza: camina de Puebla a Atlixco para salvar a sus perros y buscar ayuda

A pesar de perderlo todo, Francisco Baeza Cardoso, un carpintero de 64 años, emprendió un viaje a pie desde Atlixco hasta Puebla, arrastrando una carretilla para salvar a sus tres perros.
Francisco Baeza Cardoso, originario de La Calera Chica, Morelos, es un carpintero profesional que a sus 64 años perdió su trabajo y se encuentra en situación de calle. Sin embargo, es dueño de tres perritos, Clarita, Reno y la última, Huesitos, la cual aparentemente sufre de un tumor que le impide caminar.

La necesidad de cuidarlos y brindarles una nueva oportunidad de vida fue la razón por la que Francisco recorrió alrededor de 30 kilómetros desde Atlixco hasta Puebla, jalando bajo el sol una carretilla donde transportó a los animalitos y sus pertenencias hasta una veterinaria ubicada sobre el Boulevard Atlixco.

“Estos tres perritos viven conmigo y es mi responsabilidad cuidarlos, ya que los animalitos son seres vivos y son parte de mi familia, es la familia que tengo por el momento”, fueron las palabras que compartió Don Francisco en entrevista para Multimedios Puebla, agregando que incluso tuvo que dormir en la carretera hasta arribar a la ciudad.

Francisco Baeza, con familia adoptiva y profundo amor a los animales
Baeza Cardoso son los apellidos que, de acuerdo a sus investigaciones, le corresponden a sus padres biológicos. Don Francisco llegó desde que era un bebé a la puerta de su familia adoptiva, se desempeñó como ayudante de herrería y carpintería, donde a los 22 años aprendió a fabricar cabañas de madera, así como a realizar restauraciones de inicio a fin.

Hace unos días perdió su empleo en Atlixco y la persona que le prestaba un lugar dónde vivir le pidió que le devolviera el terreno que don Francisco le cuidaba, por lo que ya no podía hacerse cargo de sus gastos ni los de sus mascotas.

“Entonces decidí cargar con mis animalitos olvidando todo lo demás, lo material no importa para mí, sólo importan los seres vivos como ellos”, dijo Baeza mientras explicaba que Huesitos llegó a su vida una noche mientras derramaba espuma por la boca debido a que había sido envenenada.
Quedarse sin empleo fue lo que lo impulsó a tomar la decisión de montar sus pocas pertenencias en una carretilla y adaptarla para trasladar a los perritos mientras busca empleo.

“Estoy bien físicamente, no padezco de ninguna enfermedad, simplemente por la misma edad, perdí mis piezas dentales” expresó el carpintero.

Viaja de Puebla a Atlixco con nada más que sus animales

En voz de Don Francisco escuchamos con precisión detalles que pudo observar mientras se dirigía a la Angelópolis. Él narró que el viaje fue un poco pesado porque llevó cargando 83 kilos de peso a lo largo de 32 o 33 kilómetros de distancia, de los cuales 15 de ellos fueron subidas.

​El amor y esperanza por sus animales son la razón por la que cualquiera que se acerque a platicar con Baeza queda impresionado con la facilidad de la que goza para expresar cada detalle de su vida a pesar de que explicó que no cuenta con ningún tipo de educación escolarizada.

Haciendo caminatas de entre 20 y 15 minutos, además de tomar pequeños descansos fue como Baeza logró llegar a su destino:

“Me doy cuenta de que cuando uno tiene deseos de luchar por lo que uno ama, por ejemplo los animalitos que son seres vivos y merecen respeto, todo es posible”, así lo dijo el entrevistado.
Don Francisco busca reencontrarse con sus familiares
Don Francisco perdió total contacto con su familia y con cualquiera que trate de ubicarlo debido a que el celular con el que contaba se cayó y despedazó en su camino. Asimismo, afirma que jamás ha sido registrado ante la ley, por lo que no cuenta con ninguna identificación ni documento que lo respalde como ciudadano.

“A mi me gustaría votar en algún momento, poder participar en este tipo de actividades que las personas hacen, pero no tengo ningún documento que garantice mi identidad”
A pesar de que se encuentra distanciado de aquellos que lo acogieron desde pequeño, Baeza le manda un mensaje a sus parientes:

“Yo amo mucho a mi familia, la respeto, y honestamente lo que puedo decirles es que se cercioren de la verdad y que no olviden que los quiero mucho”
A pesar de que Francisco Baeza no compartió mayores detalles con relación a su ruptura familiar, se espera que el cariño y responsabilidad que transmite por todo aquello que lo rodea lo dirija a encontrar las herramientas necesarias para superar este desafío.

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