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Imagínate el susto: un carnal estaba haciendo del dos bien a gusto y de repente, ¡zas!, una serpiente lo mordió. El pobre compa acabó en el hospital.
Las fotos que andan circulando están bien fuertes. Se ve una pierna o brazo bien hinchado, y luego el escusado roto, con la víbora asomándose. Después, el baño hecho pedazos, ¡y ahí sí se ve clarita la culebra!
No se sabe bien cómo le hicieron para destrozar el baño, pero seguro fue para sacar al animal. La bronca es que la mordida se ve fea, así que chance y era venenosa. El vato ya está bajo observación médica.¡Aguas, raza! Esto demuestra que las sorpresas de la naturaleza pueden salir de cualquier lado. Si ven una víbora por su casa, no le hagan al valiente y llamen a los que saben. ¡Más vale prevenir que lamentar!
