La actriz de **54 años** presentó la película “Murder Mystery 2”, en la que protagoniza, en el Regency Village Theatre en Los Ángeles. Para su aparición en la alfombra roja, Jennifer creó un conjunto cautivador.

La exesposa de Brad Pitt lució un vestido largo de malla plateada adornado con bordados de cuentas y cadenas. Complementó el vestido con sandalias de tacón alto negras. Aniston optó por joyas minimalistas, usando dos anillos incrustados con grandes diamantes.

Añadió volumen a su cabello y lo peinó en ondas sueltas. Aniston completó su look con un maquillaje elegante, resaltado por rubor, máscara de pestañas y un lápiz labial en tono nude. La galardonada con el Globo de Oro posó amablemente para los fotógrafos en la alfombra roja, tomando las mejores posiciones para mostrar sus esbeltas y bronceadas piernas.

Acompañando a la actriz estuvo su esposo en la pantalla, Adam Sandler. El comediante se vistió de manera informal con una camisa vibrante, una sudadera con capucha gris, pantalones caqui y zapatillas deportivas. Sandler abrazó cálidamente a Aniston por la cintura y sonrió. El actor asistió al estreno con su esposa, Jackie.

Los fans de Aniston le dieron muchos cumplidos. “El vestido es hermoso, pero parece demasiado provocativo”, “Jennifer tiene unas piernas hermosas, pero no deberías lucirlas tanto”, “Ella se ve increíble. ¡No se le puede dar más de 30 años!”, “Creo que se pasó un poco con el autobronceador en las piernas”, “Atractiva, pero no vulgar. Kardashian debería inspirarse en los looks de Aniston,” “Ella sigue siendo sexy,” escribieron los seguidores.

Jennifer y Adam han compartido una estrecha amistad durante muchos años. Los actores se llaman cariñosamente con nombres de mascotas peculiares. Los revelaron durante una entrevista, en la que enumeraron las cualidades que admiran el uno del otro en el set.

Adam dejó escapar que Jennifer se retira a otra habitación para expresar su frustración después de sus besos en la pantalla. “Y eso es todo lo que tengo para ti, Anaburger,” bromeó Sandler. “Está bien, Sandalman,” le respondió Jennifer.