.
Un empresario texano de 52 años, Asher Watkins, murió durante un safari en Limpopo, Sudáfrica, cuando un búfalo cafre de 1.3 toneladas lo embistió mientras intentaba cazarlo. Watkins, agente inmobiliario y aficionado a la caza con una gran colección de rifles, estaba acompañado por un guía profesional en su segundo día de recorrido.
El animal, conocido como “Black Death” y responsable de unas 200 muertes al año en África, atacó sin aparente provocación. Le sobreviven su hija Savannah y su exesposa Courtney.