En su camino al trabajo, una enfermera de Essex, Inglaterra, descubrió una maleta abandonada en la acera. Sus instintos le dijeron que se acercara e investigara más a fondo. La mujer descubrió una sorpresa genuina cuando la abrió.
Encontró una bolsa que contenía 15 gatitos que tenían entre tres y cinco semanas de edad, abandonados en un arbusto.
La maleta estaba cortada con numerosos agujeros para que entrara aire, permitiendo a los desafortunados gatitos respirar. Quien los abandonó debió de querer que sobrevivieran. El «equipaje» también fue arrojado intencionalmente cerca de un refugio de animales conocido.
Alison Gamble, una empleada del refugio, acudió en ayuda de la enfermera y examinó a los animales. Quedó satisfecha con la condición de los gatitos: «Están en buen estado y es evidente que los gatitos han estado lejos de su madre».
«Seis de ellos muestran algunos signos de infección ocular, mientras que los demás parecen estar bien por el momento, pero queremos vigilarlos de cerca para asegurarnos de que su salud esté bien».