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Cuando los riñones están en peligro, el cuerpo puede mostrar señales importantes como:
1.Hinchazón en piernas, pies o rostro debido a la retención de líquidos.
2.Cambios en la orina, como color oscuro, espuma o aumento/disminución de la frecuencia.
3.Fatiga constante por acumulación de toxinas en el cuerpo.
4.Dolor en la espalda baja o costados, cerca de los riñones.
5.Náuseas y vómitos debido a problemas en la eliminación de desechos.
6.Pérdida de apetito sin razón aparente.
7.Picazón en la piel, causada por niveles altos de toxinas.
8.Dificultad para concentrarse por anemia o acumulación de desechos.
Es crucial reconocer estas señales a tiempo y buscar atención médica para prevenir daños mayores.
