El paso de una Dana (Depresión Aislada en Niveles Altos) dejó una estela de destrucción en Valencia y sus alrededores, con un balance devastador: al menos 60 personas fallecidas, numerosos heridos y daños estructurales de gran magnitud. Las autoridades, aún en labores de rescate y evaluación, han advertido que la cifra de víctimas podría aumentar, reflejando la gravedad de uno de los peores fenómenos meteorológicos registrados en esta región de España en el último siglo.
El fenómeno meteorológico golpeó intensamente durante la madrugada, trayendo lluvias torrenciales que superaron los 300 litros por metro cuadrado en apenas cinco horas. Este volumen de agua provocó la rápida crecida de ríos y el desbordamiento de cauces, lo que derivó en inundaciones masivas que se extendieron por caminos, carreteras y zonas residenciales. La Dana, una poderosa combinación de aire frío en altura y temperaturas cálidas en superficie, originó una tormenta de dimensiones excepcionales, cuyo impacto ha sido devastador.
Valencia amaneció sumida en el caos, con varias zonas urbanas y rurales bajo el agua. Las imágenes y videos compartidos por residentes muestran la gravedad del desastre: puentes colapsados, vehículos arrastrados por la corriente y viviendas completamente anegadas. El servicio de emergencias y los cuerpos de rescate se encuentran desplegados en múltiples puntos críticos de la ciudad y sus alrededores, tratando de localizar a los desaparecidos y asistiendo a los afectados, muchos de los cuales perdieron sus hogares o sufrieron daños materiales considerables.
La situación en otras regiones, como Castilla-La Mancha y Andalucía, también es alarmante. El fenómeno, conocido en España como “gota fría”, ha afectado a amplias zonas del país. En estas comunidades, las fuertes precipitaciones dejaron caminos intransitables, afectaron líneas eléctricas y causaron deslizamientos de tierra en varias áreas montañosas, lo que ha complicado aún más las labores de rescate y recuperación. Las autoridades locales, en coordinación con el gobierno central, han movilizado unidades de la Guardia Civil, bomberos y el Ejército para responder a esta emergencia sin precedentes
BRUTAL Así amanece Valencia España !!
Pueblos de Sedaví o Alfafar están completamente devastados. Al menos 60 victimas fatales y cientos de desaparecidos #DANA #Valencia pic.twitter.com/1GxPCaMDhL— TuiteroSismico𝕏 (@TuiteroSismico) October 30, 2024
Los daños económicos derivados de la Dana son igualmente significativos. La tormenta no solo afectó infraestructuras públicas, como carreteras y puentes, sino que también impactó en sectores como la agricultura, con cultivos arrasados y pérdida de ganado en zonas rurales. La destrucción de viviendas y locales comerciales en la ciudad ha dejado a muchas familias sin hogar y a empresarios con pérdidas cuantiosas, lo que genera gran incertidumbre para la recuperación económica en las próximas semanas.
Las lluvias y los fuertes vientos, características de este tipo de fenómenos, hicieron que miles de personas tuvieran que ser evacuadas a refugios temporales habilitados en espacios deportivos y centros comunitarios. La Cruz Roja y diversas organizaciones de ayuda han coordinado la entrega de suministros básicos, como alimentos y agua potable, para quienes han quedado desprotegidos tras la catástrofe. Asimismo, las labores de limpieza y reconstrucción se prevén largas, pues la magnitud de los destrozos ha superado las expectativas iniciales.
El desastre ocasionado por la Dana ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad de la región ante fenómenos meteorológicos extremos. En respuesta, expertos en climatología han insistido en la importancia de fortalecer las infraestructuras y planificar mejor la respuesta a emergencias climáticas que, según advierten, podrían volverse más frecuentes debido al cambio climático.