En una reciente y sentida publicación en las redes sociales, Paris Hilton se sinceró sobre el dolor y la frustración que experimentó al enfrentarse a comentarios hirientes sobre su hijo de 18 meses, Phoenix Barron. Como madre resistente y cariñosa que es, Hilton no perdió tiempo en defender a su hijo de esas palabras dañinas.
Hilton, conocida por su gracia bajo presión, hizo hincapié en que el bebé Phoenix no solo está «perfectamente sano», sino que también posee un «gran cerebro». Quiso dejar claro que su hijo es un pequeño individuo próspero que merece respeto y amor.
En su cuenta de Instagram, Hilton expresó su decepción por quienes atacan a su hijo. Como figura pública, espera comentarios, pero atacar a su hijo o al de cualquier otra persona es simplemente «inaceptable» y profundamente hiriente.
Navegar por la maternidad en el ojo público puede ser un reto, y Hilton reconoce las luchas únicas a las que se enfrenta. Algunas personas creen que si no publica nada sobre su bebé, no es una buena madre. Por otra parte, cuando comparte momentos de alegría, hay quien responde con crueldad y odio. Sin embargo, Hilton se mantiene firme en su amor y orgullo por su hijo. Lo describe como «perfectamente sano, adorable y angelical», y lo considera la «mayor bendición» de su vida. Para Hilton, cada día que pasa con Phoenix es un poderoso recordatorio de lo que de verdad importa en la vida. A pesar de los comentarios hirientes, aboga por la amabilidad y la empatía entre las personas. Le resulta difícil comprender por qué alguien puede atacar tanta inocencia. Al compartir valientemente su historia, Paris Hilton espera inspirar más compasión en el mundo.
Y aunque la experiencia le abrió los ojos a la crueldad, también la llevó a sentirse alentada por las madres de su círculo y de todo Internet que salieron en su defensa y en la de Phoenix. La estrella de Paris In Love dice que ha recibido una avalancha de cartas, mensajes de texto y otros mensajes de padres que no podían creer que ella hubiera tenido que pasar por esto tan pronto en su viaje como madre.